Aprendimos
a llenar un vaso de agua. Gracias a Tip y Coll hace cuatro décadas,
perfeccionamos la técnica de la jarra llena y el vaso vacío ambos
orientados boca arriba y en la misma vertical, en un plano superior
la jarra coincidiendo en su abertura con la del vaso y al alcanzar
ésta una determinada inclinación, vertíase el agua llenando el
cáliz de forma casi sobrenatural, como si de un efecto sin causa se
tratara.
Como si
de otro efecto sin causa se tratase, un tratado hoy se trama, así
hasta hoy, de la jarra al vaso como de la risa al miedo, de Tip y
Coll al TTIP, entre coles de Bruselas alteradas genéticamente por
unos lobbies chacales de chaqué y chistera de poca gracia y
mucho pavor, coles abonadas por un contrarrevolucionario sistema
llámese coprocracia en rústico, corporocracia para las mentes más
cultivadas.
Con el
TTIP, Acuerdo Transatlántico de Comercio e Inversiones entre la
Unión Europea y los Estados Unidos, sabrá a poco el castigo sufrido
hasta hoy por los países en vías de subdesarrollo de Europa del
Sur, pues unos individuos muy malos, representantes de las grandes
corporaciones y la clase política, ultiman en secreto este acuerdo
que sentaría las bases de un nuevo capitalismo feudal en lo humano,
devastador en lo ecológico.
Más allá
de una desregulación del mercado, el TTIP, alcanza el infinito y más
allá cuando plantea desregular todo, indefinir los derechos humanos,
pues todo lo que estos derechos suponen para las personas, para estos
individuos tan malos son estorbos, los derechos de las trabajadoras,
la protección medioambiental, la alimentación sana y la salud son
estorbos para estos individuos tan malos que ansían armonizar las
legislaciones de ambas administraciones a la más baja por una
sencilla motivación: la codicia hasta perder el juicio.
Codicia
hasta perder el juicio sí, pues dado el caso de que cualquiera de
los Estados “soberanos” considere que los derechos de sus
ciudadanos han sido vulnerados o viceversa, pueden dirigirse a los
tribunales de arbitraje entre inversores y Estados, tribunales de
arbitraje conformados ad hoc por tres jueces nombrados siempre
por la parte inversora.
Supresión
del derecho a huelga en lo socio-laboral, al carajo el Protocolo del
Coito que nos forniquen sin el condón umbilical que nos une a una
madre tierra inmunodeficiente en lo ambiental, la venida de una nueva
flora transgénica y una fauna hormonada con Somatotropina Bovina
Recombinante y Clorhidrato de Ractopamina en lo alimentario,
envenenamiento sistemático de la población con menos recursos
gracias a los más de 30.000 fármacos tóxicos prohibidos hoy en
Europa y legales en los Estados Unidos…
Gracias a
Tip y Coll hace cuatro décadas aprendimos a llenar un vaso de agua.
Aprendamos a mojarnos hoy, pues de lo contrario habrá sequía, que
todas las riadas humanas que se anuncian para el próximo 18 de abril
en ambos continentes desemboquen en el atlántico hasta ahogar a la
bestia, desde Iruña llamamos a nuestra marea que confluya a las al
17:30 en el nacedero de la vieja estación de autobuses.
Colectvo Malatextos, 13 de abril de 2015
No hay comentarios:
Publicar un comentario